Una paciente excepcionalmente única, que ha desarrollado 12 tumores, al menos cinco de ellos malignos en menos de 40 años de vida, desde que era una bebé, ha sido objeto de una investigación por especialistas del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas de España (CNIO). Cada uno de los tumores ha sido de un tipo diferente y en órganos diferentes, pero siempre han generado una fuerte respuesta antiinflamatoria que los combate. Comprender cómo su sistema inmune reacciona ayudará a estimular el sistema inmunitario en otros casos, comunicó el CNIO este miércoles.
"Todavía no entendemos cómo este individuo pudo haberse desarrollado durante la etapa embrionaria, ni pudo haber superado todas estas patologías", comentó Marcos Malumbres, jefe del grupo de División Celular y Cáncer del CNIO. Según el especialista, el estudio de este caso singular, contribuyó al desarrollo de una innovadora técnica, el análisis unicelular, que puede detectar células con potencial tumoral en etapas muy tempranas, mucho antes de las pruebas clínicas y de diagnóstico por imagen. "También proporciona una forma novedosa de estimular la respuesta inmune frente a un proceso canceroso", puntualizó.
Debido a que a la paciente no se le detectaron alteraciones en la secuencia de ADN de los genes frecuentemente implicados en el cáncer hereditario, se analizó su genoma completo y encontraron mutaciones en un gen esencial en el proceso de división y proliferación celular, llamado 'MAD1L1'. Los especialistas determinaron que las mutaciones detectadas provocan alteraciones en el número de cromosomas de sus células. Aunque los modelos secuenciados a partir de animales predijeron su muerte, al recibir copias defectuosas de sus padres, contra todo pronóstico, esta española, de 36 años, sigue llevando una vida relativamente normal, el último cáncer se lo detectaron cuando tenía 28 años.
"Académicamente no podemos hablar de un síndrome nuevo porque es la descripción de un único caso, pero biológicamente lo es", subrayó Miguel Urioste, del CNIO. En criterio de Urioste, nunca se ha descrito ningún otro caso como este. Se conocen otros genes cuyas mutaciones alteran el número de cromosomas en las células, pero "este caso es diferente por la agresividad, el porcentaje de aberraciones que produce y la extrema susceptibilidad a una gran cantidad de tumores diferentes", sentenció.
Para la detección de las mutaciones los científicos utilizaron una novedosa tecnología de análisis unicelular, que proporciona una gran cantidad de información. Se trata de analizar los genes "de cada una de las células sanguíneas por separado", explica Carolina Villarroya-Beltri, investigadora del CNIO. "Analizando miles de estas células por separado, una a una, podemos estudiar qué le está pasando a cada célula en concreto, y cuáles son las consecuencias de estos cambios en el paciente", detalló.
El análisis de una sola célula reveló, entre otras anomalías, que la muestra de sangre contenía cientos de linfocitos (células defensivas) cromosómicamente idénticos, por lo que provenían de una sola célula que proliferaba rápidamente, lo que se corresponde con las primeras etapas de un cáncer. Con base en este hallazgo, los investigadores propusieron esta técnica para identificar células con potencial tumoral.
Los cinco cánceres agresivos desarrollados por la paciente desaparecieron con relativa facilidad, generando mucha intriga entre el equipo investigador. Su hipótesis es que "la producción constante de células alteradas ha generado una respuesta defensiva crónica en el paciente frente a estas células, y eso ayuda a que los tumores desaparezcan. Pensamos que potenciar la respuesta inmune de otros pacientes les ayudaría a frenar el desarrollo tumoral", sostiene Malumbres.
Dado que el 70% de los tumores humanos tienen células con un número anormal de cromosomas, el descubrimiento de que el sistema inmunitario es capaz de desencadenar una respuesta defensiva frente a células con esta anomalía es, según Malumbres, "uno de los aspectos más importantes de este estudio, que puede abrir nuevas opciones terapéuticas en el futuro". Los resultados de este trabajo fueron publicados en Science Advances.