Una tormenta que azotó este domingo la provincia rusa de Kursk dejó al menos dos muertos, además de dañar varios edificios, cortar las líneas eléctricas y derribar árboles, informa RIA Novosti.
Según se aprecia en algunas grabaciones que se difundieron en redes sociales, la tormenta generó también un tornado.
Un total de 87 asentamientos con una población de más de 5.000 personas se quedaron sin electricidad, indicaron las autoridades locales.
El cuerpo de la primera víctima, un estudiante de 18 años, fue encontrado en la habitación de una residencia universitaria.
"Según información preliminar, el fallecido se encontraba solo en la habitación. En el transcurso del huracán, un fragmento de madera dañó una ventana cuyo cristal cayó en el abdomen del adolescente, lo que le causó lesiones, de las que murió en el acto", precisó el Comité de investigación de la región. Además, las ráfagas de viento destruyeron parcialmente el techo del edificio universitario.
Más tarde, fue encontrado el cuerpo de un hombre de entre 50 y 60 años bajo un árbol caído, pero aún se desconocen los pormenores del incidente.
El Ministerio de Emergencias de Rusia alertó que el viento, con rachas de hasta 22 m/s, se mantendrá en la zona hasta el 19 de septiembre.