El 11 de septiembre, el político declaró en la emisora ARD que Alemania tiene que "pagar la factura de todos modos", pero la cuestión es si debe hacerlo ahora, "interviniendo en los mercados y amortiguando [la crisis]", o si debe esperar, lo que puede causar insolvencia y desempleo. Klingbeil subrayó que elegiría la primera opción e intervendría ahora.
Hasta el momento, Berlín evitaba la intervención directa en el mercado energético, pero permitía a las compañías de gas repercutir una parte de los costes a los clientes, según Bloomberg. Al mismo tiempo, el ministro de Economía de Alemania, Robert Habeck, señaló en una reunión de los ministros de Energía de la Unión Europea que está en contra de la introducción de un tope en el precio del gas ruso.
A pesar de que el canciller alemán Olaf Scholz anunció que su país estaba "preparado" para un corte de gas por parte de Rusia, los expertos afirman que Alemania se enfrentaría con una recesión económica profunda.
