Rusia necesitará al menos 10 años para aumentar sus suministros de gas a Asia hasta un nivel cercano a las exportaciones a la Unión Europea en 2021, según un informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
"Nuestro análisis muestra que, en el mejor de los casos, Rusia necesitará al menos diez años para aumentar sus suministros de gas a los mercados asiáticos hasta un nivel cercano a las exportaciones a la Unión Europea en 2021 [155.000 millones de metros cúbicos]", indica la agencia.
Se espera que Rusia intensifique los esfuerzos para redirigir las exportaciones de gas natural licuado y por tubería a Asia debido al rechazo gradual de los países europeos a los suministros rusos.
Además, la AIE destacó que la redirección de suministros requerirá el desarrollo de nueva infraestructura y grandes inversiones, mientras el acceso de Moscú a los mercados de valores y las tecnologías energéticas queda restringido por sanciones occidentales impuestas a Rusia por su operación militar en Ucrania.