Kiev y Bruselas van camino al abismo

La Cancillería rusa carga contra el suministro de armas a Kiev por Occidente y asegura que esa cooperación va en contra de la Unión Europea (UE) y Ucrania.
“La Unión Europea continúa invirtiendo en más operaciones militares con el suministro de armas y equipos a Ucrania, pero cualquier intento de lograr la victoria en el campo de batalla es un camino al abismo tanto para Kiev como para Bruselas”, indicó la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, en un comunicado emitido este lunes en el sitio web de la misma Cartera.
Las declaraciones de la vocera rusa se produjeron en reacción a la nueva aprobación de los Veintisiete, que incluyó 500 millones de euros para armar a Ucrania, lo que eleva a 2500 millones de euros la ayuda total del bloque al país eslavo.
Cuestionó asimismo que la UE invierta en más hostilidades al suministrar armas y equipo militar a Ucrania, mientras que hipócritamente dice estar ofreciendo la rama de olivo a Rusia.
Conforme a Zajárova, financiar la entrega de armamento a Kiev indica la falta total de voluntad de la UE para promover un acuerdo político que ponga fin al conflicto ucraniano.
A continuación, la diplomática rusa calificó al llamado Fondo Europeo de Apoyo a la Paz de ser, en realidad, un “fondo de guerra” y puso de relieve que las fuerzas del Ejército de Ucrania y los nacionalistas utilizan armas occidentales para cometer crímenes de guerra contra los civiles, incluidos mujeres, ancianos y niños, así como para destruir infraestructura civil, afirmó.
Desde el estallido del conflicto en Ucrania, el pasado 24 de febrero, e incluso antes, los aliados occidentales de Ucrania, liderados por EE.UU., han intensificado su apoyo armamentístico a Kiev para combatir a Rusia, lo que desde el Kremlin se ve como la causa de la prolongación de la crisis.
Moscú asevera que Occidente está poniendo en riesgo su propia seguridad al entregar ingentes suministros de armas a Ucrania, y advierte de que, de esta forma, los países occidentales están “echando leña al fuego” del conflicto, lo que “tendrá repercusiones trágicas”.