Desde papel higiénico hasta los yogures, pasando por el café molido o las barras de chocolate, los fabricantes están reduciendo silenciosamente el volumen de sus productos en los envases, sin bajar en ningún caso los precios; una práctica que se conoce como 'reduflación' que se está acelerando en todo el mundo, informa AP.
En EE.UU., una caja de pañuelos desechables Kleenex contiene ahora 60 servilletas; pero hace unos meses venía con 65. La cantidad de yogur en los envases de algunas marcas también ha disminuido. En el Reino Unido, las latas de café americano de la marca Nestlé se venden con 10 gramos menos. Mientras, en la India, una barra de jabón para platos Vim ha pasado de contener 155 a 135 gramos.
La reduflación, la reducción progresiva y en pequeña medida de las raciones, no es un fenómeno nuevo. Se manifiesta en tiempos de alta inflación a medida que las empresas lidian con el aumento de los costos de la materia prima, del envase, de la mano de obra y del transporte. La inflación de precios al consumidor global aumentó un 7 % en mayo, un ritmo que, probablemente, continuará hasta septiembre, según S&P Global.
"Viene en oleadas. Estamos en un maremoto en este momento debido a la inflación", advierte Edgar Dworsky, un defensor estadounidense de los derechos de los consumidores. El activista señala que empezó a notar la reducción del volumen de los productos en los envases en el tercer trimestre del 2021 y que, desde entonces, se ha disparado.
Un fabricante estadounidense de café instantáneo alega que la reducción del volumen de sus productos se debe al uso de una nueva tecnología que da como resultado granos de café más livianos. Sin embargo, Dworsky afirma que las empresas recurren a la práctica de reducir la cantidad de sus productos, porque saben que los clientes notarán el incremento de los precios, pero no así "pequeños detalles", como la reducción del tamaño del rollo de papel higiénico o un menor peso neto del yogur.
Otras empresas, en cambio, se muestran transparentes a la hora de efectuar estos cambios. En Japón, un fabricante de alimentos preparados anunció reducciones del 10 % en el peso de sus raciones y aumentos del 10 % en el precio para muchos de sus productos. La empresa defendió la medida debido al incremento en el costo de las materias primas. El pasado mes de enero, Domino's Pizza anunció que reduciría la cantidad de alitas de pollo en cada cajita, sin variar su precio.
En países como la India, la reduflación se concentra principalmente en áreas rurales, donde las personas, por regla general, tienen menos recursos y son más sensibles al incremento de precios. Por su parte, el profesor de gestión de cadenas de suministros de la Universidad Estatal de Arizona (EE.UU.), Hitendra Chaturvedi, sospecha que las compañías podrían estar usando la escasez de suministros "como arma para ganar más dinero".