"La Secretaría [de la OMI] recibió informaciones sobre las minas marinas que están flotando en la zona del mar Negro, incluyendo frente a las costas de Rumanía y Turquía, debido al conflicto en marcha en Ucrania, lo que representa una amenaza grave e inmediata para la seguridad de las tripulaciones y embarcaciones que operan en la región", dice el comunicado.
Por lo tanto, advierte la organización, las embarcaciones deberían proceder con precaución a la hora de trabajar en esta región, incluso frente a las costas de los Estados litorales.
"La Secretaría sigue en estrecho contacto con todos los actores clave de la región y continúa contribuyendo a los intentos de abordar los temas de la seguridad y la protección en esta situación", señala la nota.
El 24 de mayo, un alto cargo de la provincia ucraniana de Jersón, controlada por Rusia, acusó a las tropas de Ucrania de haber minado la única salida desde la capital provincial al mar Negro.
El funcionario agregó que se vio suspendido el tránsito de buques mercantes por el Dniéper.
El pasado 19 de marzo, el Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) afirmó que militares ucranianos habían instalado unas 420 minas explosivas para impedir el acceso de fuerzas rusas a los puertos de Odesa, Ochakov, Chernomorsk y Yuzhni.
Las corrientes, advirtió el ente, podrían arrastrarlas hacia el estrecho del Bósforo, y de allí al Mediterráneo.
