"Obviamente no podemos prevenir que Rusia venda el petróleo a otros, no somos tan poderosos, pero sí somos el cliente más importante para Rusia. Ellos tendrán que buscar a otros y obviamente tendrán que bajar el precio", dijo Borrell a los periodistas antes de empezar la segunda jornada de la cumbre comunitaria en Bruselas.
La nueva restricción, apuntó el jefe de la diplomacia europea, tiene como objetivo "disminuir los recursos financieros con que Rusia alimenta su maquinaria bélica".
El 30 de mayo, el Consejo Europeo acordó que su nuevo y sexto paquete de sanciones contra Rusia incluirá el crudo y los productos petrolíferos exportados a los Estados miembros, con una excepción temporal para el petróleo crudo que se suministra por oleoducto.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, estimó el 30 de mayo que las nuevas sanciones afectarán con carácter inmediato al 75% del petróleo que la UE importa de Rusia, y el 90% de ese volumen para finales de 2022.
