“Llevaba una fuerza terrible... Tejas, palos, de todo”, dijo a Associated Press Rafael Chacón, animador de una base de campismo de 60 años y vecino de la localidad costera de Guanabo, al este de la capital. “Pudimos escapar. Dicen que vino del mar, pero en segundos estaba aquí. Fue una cosa rapidísima. Gracias Dios no hubo más que estos daños”.
Un reporte del Instituto de Meteorología del portal oficial Cubadebate confirmó que “alrededor de las 10.30 de la mañana, una tromba marina penetró en tierra y se convirtió en un débil tornado”. Además, el frente frío que azota a la isla provocó una tormenta local severa en las Playas del Este, Guanabo y Boca Ciega, en el municipio de Habana del Este.
Poco usuales en la isla, los tornados suelen ocasionar pánico entre la población. El más dramático se registró a finales de enero de 2019 cuando murieron tres personas, más de un centenar quedó herido y decenas de cuadras fueron devastadas también en el este de la ciudad, pero en una zona más poblada.
Un comunicado de la empresa eléctrica indicó que se trabaja en devolver el servicio dañado.
“Se quemaron los cables, me cayeron chispas encima y por lo único que me dio fue por tirarme en el piso a pedir misericordia a Jesucristo”, narró a la AP asustada Ana Ida Wilson, una trabajadora de centro educativo local de 55 años. “Las matas (árboles) comenzaron a caer arriba de la escuela... Hay una ventana de un aula que se la llevó también”.
