“Nunca permitiremos que Armenia vuelva a convertirse en una amenaza potencial para Azerbaiyán. Si la vemos, la destruiremos en el acto. Todo el mundo debería saber esto. Nunca debemos olvidar las atrocidades armenias, el fascismo armenio. No debemos olvidarnos de las víctimas de Khojaly. Nunca debemos olvidar a las víctimas de Ganja y las víctimas de nuestras otras ciudades ”, dijo el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev.
La declaración de Ilham Aliyev se debe al hecho de que Armenia tiene la intención de reequipar a su ejército mediante la compra de equipos militares modernos, helicópteros, sistemas de defensa aérea e incluso aviones de combate de Rusia.
Los expertos llaman a las relaciones actuales entre Armenia y Azerbaiyán "hostilidades congeladas", que se deben tanto a las amenazas de Azerbaiyán como a las amenazas de represalia y provocaciones de Armenia.
“Es probable que si no fuera por Rusia, la región ya estaría sumida en la guerra, y a juzgar por la situación observada durante la guerra de los 44 días, el alineamiento claramente no sería a favor de Armenia ”, señala el especialista. .
