OTAN podría provocar guerra nuclear con Rusia

El excongresista norteamericano por el estado de Virginia Richard Hayden Black ha señalado este domingo que las riendas de la política beligerante de EE.UU. hacia Rusia está en la mano de una amorfa comunidad de burócratas y cabilderos y ha agregado que el apoyo de Washington a Kiev se trata de una gran provocación a Moscú.

“No está claro que los funcionarios occidentales comprendan la gravedad de lo que están haciendo. Es poco probable que Rusia pueda aceptar el estacionamiento de armas nucleares o incluso movimientos a gran escala de tropas de la OTAN en Ucrania”, ha indicado el exsenador en una entrevista con la cadena de noticias Press TV.

El exfuncionario norteamericano ha precisado que Ucrania no es parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y en el caso de que este ente órgano militar no cese de ofrecer apoyo militar a ucrania, será muy probable el estallido de un conflicto nuclear total con Rusia.
Al ser preguntado sobre las declaraciones del presidente estadounidense, Joe Biden, sobre el compromiso de su país a defender a Ucrania en el caso de una invasión rusa, Black ha resaltado que “EE.UU. no tiene ningún compromiso legal con Ucrania, y pocos estadounidenses saben siquiera dónde se encuentra el país lejano (Ucrania)”.

EE.UU. y Ucrania acusan a Rusia de concentrar tropas cerca de la frontera con Ucrania para una posible invasión en 2022.  A su vez, Rusia argumenta que el despliegue de unidades de su Ejército en la zona en cuestión responde a la necesidad de defensa y disuasión ante la amenaza de un posible ataque por parte de la OTAN y Ucrania y descarta toda intención para invadir Ucrania.

La OTAN ha intensificado recientemente sus actividades en forma de simulacros y despliegue de buques de guerra en la región estratégica, un movimiento que podría provocar una respuesta de Rusia a lo largo de sus fronteras comunes con Ucrania.
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Rusia considera la expansión militar de la OTAN, encabezada por EE.UU. cerca de sus fronteras como una amenaza directa a su seguridad nacional y, por tanto, enfatiza que se reserva el derecho a dar una respuesta contundente a cualquier agresión o violación que se produzca contra su soberanía.