Una comisión de la Knéset (Parlamento), encabezada por la diputada Ayelet Shaked, del partido Habait Haiehudí, aprobó un histórico proyecto de ley que ordena someter a prisión efectiva a todos los jóvenes ultra ortodoxos (haredim), de entre 18 a 24 años, que no cumplan el servicio militar.
No obstante, se estima que la ley galvanizará a los líderes ultra ortodoxos a emprender una “guerra total” contra esa propuesta.
El proyecto de ley enfrentó de inmediato el rechazo del diputado Moti Yogev, correligionario de Shaked, quien instó a la comisión a una segunda votación antes de que sea elevado al pleno de Knéset para su aprobación.
Los líderes ultraortodoxos han advertido que demostrarán - si el proyecto se convierte en ley - que será imposible aplicar. Los rabinos ultra ortodoxos, que se oponene al servicio militar, han advertido que los estudiantes de las academias rabínicas (yeshivot) prefieren colmar las cárceles de Israel, si se les obliga a ponerse el uniforme militar.
Las sanciones con prisión efectiva comenzarán a aplicarse en 2017, de acuerdo con los términos del alistamiento al Ejército de Defensa de Israel (Tzáhal).
Se estima que la propuesta será aprobada en una segunda votación, ya que cuenta con el apoyo del ministro de Finanzas y del primer ministro, Biniamín Netanyahu.
Los principales periódicos que se publican en la comunidad ultra ortodoxa advierten que una se avecina una gran protesta en contra del proyecto de ley, a principios de la seman próxima.
