EEUU espía para ejercer manipulaciones económicas y políticas

Un exempleado de la inteligencia estadounidense asegura que los planes de espionaje de Washington no están dirigidos para combatir el terrorismo, sino que tienen como fin manipulaciones económicas y políticas.

El masivo espionaje del Gobierno de EE.UU. no apunta acabar con adversarios o terroristas, más bien, es un instrumento para obtener una inteligencia competitiva con el fin de “subvertir a los líderes políticos de otros países y sus agendas económicas”, ha asegurado este jueves Scott Rickard, durante una entrevista concedida a Press TV.

El analista ha recalcado que las actividades de espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés) de EE.UU. es una “gran industria” con un “presupuesto excepcional”.

Esta red secreta, según Rickard, está bien organizada a partir de personas que han estado trabajando juntas durante toda su vida y que se sienten orgullosas de las misiones que realizan sin tener en cuenta de que incurren en violación a la privacidad de ciudadanos, ha destacado.

Estas declaraciones se difunden mientras el Observatorio de Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés) enfatiza que la NSA sigue violando los derechos de la privacidad de los individuos.

Los proyectos de espionaje del Gobierno estadounidense fueron sacados a la luz después de que el exempleado de inteligencia de EE.UU. Edward Snowden empezará en junio a filtrar documentos clasificadas que revelaban programas de la NSA sobre la intercepción de llamadas telefónicas y correos electrónicos de decenas de millones de personas en el mundo, entre ellos los líderes mundiales.