El asteroide de cinco metros 2014 AA entró en la atmósfera de la Tierra sobre el Atlántico la madrugada del jueves, un día después de haber sido descubierto; lo más probable, el cuerpo celeste se desintegró por completo y no llegó hasta la Tierra.
El asteroide 2014 AA fue descubierto en la mañana del 1 de enero por el observatorio norteamericano Mount Lemmon.
Los astrónomos llevaron a cabo una serie de mediciones, cuyos resultados arrojaron que dentro de un día el asteroide debía caer a nuestro planeta.
Según los cálculos, la zona con más probabilidad de que cayera se extiende desde Centroamérica hasta África Oriental. El tamaño del asteroide 2014 AA oscilaba entre los tres y cinco metros.