Las opciones para el Sinaí que tiene el sionismo:
Crear una “nueva palestina” en el Sinaí: que junto con la Franja de Gaza formarían una nación palestina. Recordemos como en el llamado “acuerdo del siglo” propuesto por la Administración Trump busca un pedazo del Sinaí para crear un estado palestino en territorio egipcio. Israel por su parte crearía más asentamientos ilegales en Cisjordania, y en un futuro próximo expulsaría a los palestinos de esta zona para Jordania. Por su parte la “nueva palestina” no tendría derecho a autodeterminarse ni a tener ejército para proteger sus territorios y población, en cuanto a su fuerza militar, el régimen israelí tendría “asegurada” su protección, claro los palestinos tendrían que pagar por esto, y además, los palestinos tendrían que aceptar a Jerusalén como capital de los judíos.
Balcanizar Egipto: que la minoría cristiana copta formen un estado en la pesinsula del Sinaí y se vuelvan independientes de El Cairo. Egipto es un país con una gran diversidad étnica, a pesar de tener una mayoría musulmana, el 25 % de su población es cristiana. Los cristianos hasta el día de hoy siguen sufriendo ataques, desplazamientos, éxodos y destrucción de sus iglesias. Por eso crearon a los grupos yihadistas radicales para mostrar a los cristianos frente a la opinión pública como mártires frente al “terrorismo islámico” así la Mossad y la CIA buscaban crear un caos permanente en el Sinaí para a forzar el éxodo masivo de habitantes y dejar la zona despoblada. Para que así Israel vuelva a expandirse, controlar sus recursos de hidrocarburos y seguir con sus sueños del gran Israel.
Retomarla por la fuerza: inicialmente los planes sionistas era tener el control de los altos del Golán, la Franja de Gaza y el sur de El Líbano, para con estos territorios chantajear a los gobiernos de estos países para firmar la paz, establecer las fronteras y luego devolverlos tal como hizo con el Sinaí de Egipto. El Golán sirio y las franjas Shebaa del sur de El Líbano bajo ocupación israelí, ya nos las piensas devolver quieren anexarlos a sus territorios, por sus grandes reservas de agua que poseen estas zonas. De ahí que el presidente Donald Trump reconociera al Golán como parte de la geografía israelí. Antes la postura israelí era si mis países vecinos firman la paz, y no interfieren con la causa palestina y nos reconocen como estado, Sus territorios serán devueltos. Ahora para el sionismo más radical como para Oded Yinon, devolver el Sinaí a Egipto fue un gran error tanto que pensaba en una opción futura para recuperarlo por su importancia geo-estratégica y por su gran cantidad de recursos naturales. Ellos no van a devolver ni Jerusalén, ni el Golán ni las franjas Shebaa, al contrario sus planes expansionistas en todo Oriente Medio, siguen más vigentes que nunca su plan yinon sigue observando en las sombras, esperando el surgimiento de una nueva “revuelta “árabe”.
En medio de las excavaciones en la ciudad israelí de Rahat, de predominancia beduina, que se sitúa en el desierto del Néguev, arqueólogos desenterraron una de las mezquitas más antiguas del mundo. Las ruinas de la mezquita al aire libre comprenden una construcción rectangular con un mihrab, un nicho semicilíndrico que indica la qibla, dirección en la que hay que mirar durante las oraciones y que está orientada hacia la Kaaba en La Meca (Arabia Saudita).
Se estima que la mezquita hallada tiene unos 1.200 años de antigüedad y se remonta a los siglos VII y VIII d.C. Gideon Avni, experto en el islam temprano de la Autoridad de Antigüedades de Israel, señaló en un comunicado de la institución citado por medios locales que es "una de las primeras mezquitas de las que se tiene constancia desde el inicio de la llegada del islam a Israel tras la conquista árabe de 636 d.C.".
“Si hay personas que se atreven a tratar de separar a Taiwán del país, el Ejército de China estará listo para ir a la guerra para salvaguardar firmemente la soberanía nacional, la unidad y la integridad territorial”, ha declarado el Ministerio de Defensa del país asiático, a través de un comunicado.
"Las medidas de EE.UU. están atacando esencialmente las cadenas mundiales de suministro y de valor. En palabras simples, EE.UU. está abriendo fuego contra todo el mundo, inclusive contra sí mismo", afirmó este jueves el Ministerio de Comercio de China
