La fotógrafa Jingna Zhang y las caricaturistas Sarah Andersen, Hope Larson y Jessica Fink presentaron este viernes, en un tribunal federal de California (EE.UU.), una demanda colectiva en contra de Google y su empresa matriz, Alphabet, por infringir derechos de autor.
Las querellantes alegan que Google es responsable del mal uso de "millones" de imágenes protegidas por derechos de autor, incluidas las suyas, para entrenar a su modelo de inteligencia artificial (IA) de difusión de texto a imagen, denominado Imagen, para que aprenda a responder las solicitudes de los usuarios. También señalan que "nunca autorizaron a Google a utilizar sus obras protegidas por derechos de autor como material de formación".
"Estas imágenes de formación protegidas por derechos de autor fueron copiadas múltiples veces por Google durante el proceso de entrenamiento de Imagen. Dado que Imagen contiene ponderaciones que representan una transformación de la expresión protegida en el conjunto de datos de entrenamiento, Imagen es en sí misma una obra derivada infractora", se puede leer en el texto de la denuncia.
Las artistas pidieron al tribunal una indemnización por daños y perjuicios legales y de otro tipo, así como una orden que obligue a Google a destruir o "disponer razonablemente" de las copias de sus obras.
Según Reuters, el portavoz de Google, José Castaneda, expresó este lunes que sus "modelos de IA se entrenan principalmente con información disponible públicamente en Internet". "La ley estadounidense ha apoyado durante mucho tiempo el uso de la información pública de maneras nuevas y beneficiosas, y refutaremos estas afirmaciones en los tribunales", añadió.
Reuters también recoge que los abogados de las artistas, Joseph Saveri y Matthew Butterick, comunicaron que el caso era "otro ejemplo de una empresa de tecnología multimillonaria que elige entrenar un producto comercial de inteligencia artificial sobre las obras protegidas por derechos de autor de otros sin consentimiento, crédito o compensación".
En la misma demanda presentada se plantea que, para entrenar a Imagen, Google usó uno de los conjuntos de datos que las empresas tecnológicas Stability AI y Midjourney ya habían utilizado para entrenar sus propios modelos. Una demanda similar a la presentada el pasado viernes está en curso por parte de Zhang y Andersen contra estas dos empresas por el presunto uso indebido de su trabajo.