"Estados Unidos abrió fuego contra sí mismo al atacar a las Fuerzas Armadas yemeníes", afirmó, y prometió que Yemen tomaría represalias en breve.
Anteriormente, el 31 de diciembre, los rebeldes se enfrentaron a helicópteros estadounidenses que acudían en ayuda de un buque mercante de la naviera danesa Maersk que habían atacado. En el incidente, las fuerzas estadounidenses hundieron tres de los cuatro barcos atacantes y eliminaron a 10 soldados yemeníes.
Las Fuerzas Armadas de Yemen, controladas por el movimiento de los hutíes rebeldes Ansar Allah, declararon en noviembre la intención de atacar cualquier barco israelí en el mar Rojo, tanto los de bandera israelí como los que son propiedad o están operados por empresas del país hebreo.
A principios de diciembre confirmaron su intención, afirmando que atacarían "cualquier barco que se acerque a Israel".