Zona de muerte

El director general de la Organización Mundial para la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, describió la desesperante situación que atraviesan los sanatorios de la Franja de Gaza, concretamente el hospital de Nassar, en Jan Yunis, en el sur del enclave.
"Los informes sobre las hostilidades en curso y los intensos bombardeos en Gaza son petrificantes. Ayer nuestro equipo visitó el Hospital Médico Nassar en el sur. Estaba lleno con 1.000 pacientes, tres veces más que su capacidad", escribió este domingo el alto cargo.
En ese sentido, describió que en el lugar "innumerables personas buscaban refugio, llenando cada rincón de las instalaciones", recibiendo atención en el suelo y "gritando de dolor".
"Estas condiciones son más que inadecuadas: inimaginables para la prestación de atención sanitaria. No encuentro palabras lo suficientemente fuertes para expresar nuestra preocupación por lo que estamos presenciando", aseveró Ghebreyesus, que exigió un inmediato alto al fuego.
En esa línea, James Elder, portavoz mundial de Unicef, declaró a Al Jazeera que el hospital Nassar "parece una zona de muerte en este momento". "Dondequiera que uno mire, hay niños con quemaduras de tercer grado, heridas de metralla, lesiones cerebrales y huesos rotos. Madres llorando por niños que parecen estar a horas de morir", contó.
Además del riesgo de morir en un ataque aéreo israelí, las enfermedades son la segunda mayor amenaza para los niños, añadió. "Corremos el riesgo de que muchos niños [...] mueran por falta de agua, protección y saneamiento", aseveró el vocero.
Desde que comenzó la guerra entre Israel y el grupo palestino Hamás, más de 6.000 niños se encuentran entre los muertos por los ataques de las Fuerzas de Defensa de Israel en la Franja de Gaza.