El Gobierno de Francia planea dejar de enviar gratuitamente armas a Ucrania desde sus propias existencias, en lugar de lo cual permitirá que el régimen de Kiev compre armamento directamente a los fabricantes franceses, a través de un fondo de apoyo.
"Ahora estamos negociando con nuestros colegas ucranianos para que Ucrania compre nuevos obuses con dinero de un fondo especial, y para que el Ejército francés ya no tenga que transferir armas de sus arsenales", declaró el domingo el ministro de Defensa francés, Sébastien Lecornu, en una entrevista a la emisora local LCI.
Según un informe del Parlamento francés publicado la semana pasada, al que tuvo acceso Le Monde, la asistencia militar del país galo a Ucrania ha alcanzado hasta el momento los 3.200 millones de euros (3.400 millones de dólares), lo que lo ubica entre los principales patrocinadores europeos del Ejército ucraniano, junto con el Reino Unido y Alemania.
En esa línea, París ha prometido 200 millones de euros adicionales (213 millones de dólares) al fondo de apoyo a Ucrania, para garantizar el acceso continuo de las Fuerzas Armadas ucranianas al equipo militar francés, añadió Lecornu. Según lo establecido, Kiev puede gastar dinero del fondo en compras de armas, pero sólo a contratistas franceses.
Desde el comienzo del conflicto, Francia ha transferido una gran cantidad de equipo militar a Kiev, incluidos 30 obuses autopropulsados Caesar, varias docenas de vehículos blindados de transporte de tropas (VAB) y vehículos blindados de reconocimiento AMX-10 RC, así como 15 obuses TRF1 de 155 mm, alrededor de 100 misiles tierra-aire Mistral y dos lanzacohetes unitarios.