En una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la situación en Oriente Medio, el representante permanente de Rusia, Vasili Nebenzia, declaró este viernes que el bloqueo de EE.UU. a las iniciativas de paz en la Franja de Gaza no podía sino radicalizar el conflicto.
"En el enclave palestino se está produciendo un verdadero desastre humanitario, una tragedia de proporciones mundiales", inició su discurso el diplomático. Asimismo, recordó que casi la mitad de las viviendas e infraestructuras civiles vitales han quedado completamente destruidas o dañadas por los ataques israelíes. Se trata, dijo, de 35.000 edificaciones destruidas y otras 165.000 dañadas, entre ellas 221 escuelas, 42 instalaciones de la UNRWA, 7 iglesias y 56 mezquitas.
Nebenzia denunció que cuatro centros médicos palestinos han sido bombardeados en las últimas 24 horas, mientras que 18 de los 35 hospitales de la Franja de Gaza han debido cesar por completo sus actividades.
"Estamos consternados y profundamente indignados por el hecho de que se ataquen objetivos civiles como escuelas, hospitales, mezquitas y campos de refugiados", manifestó el representante ruso. "Insistimos en que los ataques selectivos contra objetivos civiles constituyen una violación flagrante del derecho internacional humanitario", agregó.
Nebenzia recordó que "hay reglas en cualquier guerra", y los bombardeos israelíes contra la Franja de Gaza son "categóricamente inaceptables". El diplomático aseveró que hoy en día, en el enclave palestino "no existen zonas civiles seguras", ya que incluso las instalaciones del sur están siendo atacadas.
Mientras tanto, Moscú está prestando ayuda humanitaria a la población palestina, destacó Nebenzia. Esta jornada se supo que Rusia enviará por avión a Egipto una cuarta remesa de alimentos y medicinas. Sin embargo, lamentó, los convoyes humanitarios que pasan por Rafah con asistencia extranjera destinada al enclave son "claramente insuficientes para cubrir las enormes necesidades de la Franja de Gaza".
De otra parte, Nebenzia apuntó que "a la sombra de los trágicos acontecimientos de Gaza, se ha olvidado inmerecidamente la explosiva situación de Cisjordania".
También señaló la necesidad de evitar una mayor escalada del conflicto. "Estamos convencidos de que el primer paso en esta dirección sería un pronto alto el fuego en la zona de conflicto palestino-israelí. Sólo esto, y no una pausa a corto plazo, es la única medida real que permitiría evitar nuevas víctimas, garantizar el suministro de la ayuda humanitaria necesaria a los necesitados, asistir a la población de Gaza y poner una barrera a una nueva escalada de la confrontación armada y a la implicación en ella de nuevos participantes regionales", insistió.
"A menos que se tomen medidas drásticas para desescalar el conflicto, sus efectos se dejarán sentir durante un tiempo imprevisible", advirtió el representante ruso ante la ONU.
En ese sentido, recalcó que los riesgos de una confrontación global en esa región, que tiene "un enorme número de problemas y conflictos sin resolver históricamente", son "evidentes". Según Nebenzia, el conflicto palestino-israelí es una cuestión clave sin la cual no cabe esperar una paz duradera en Oriente Próximo.
Continuando su discurso, el diplomático recordó que Moscú ha advertido que "olvidar el marco jurídico internacional para resolver el conflicto llevaría a una escalada, y entonces el mundo entero tendría que ocuparse de ello". Asimismo, aseveró que "los intentos de monopolizar la función de mediación no hacen sino exacerbar el conflicto".
"El bloqueo por parte de Washington de las iniciativas de paz y de alto el fuego en la Franja de Gaza en esta fase, y su línea unilateral durante los últimos años, ha representado de hecho una falta de voluntad para aplicar todo lo que los países y los pueblos habían acordado", denunció.
"La intensificación de la presencia militar extranjera en la zona de conflicto armado, en particular el despliegue estadounidense en el Mediterráneo oriental y las declaraciones belicosas y provocadoras, también forman parte de la escalada global", agregó, para luego destacar "el papel central de los Estados de Oriente Medio en la resolución de los problemas de la región".
"No se debe permitir que fuerzas exteriores exploten el enfrentamiento palestino-israelí para romper las recientes tendencias positivas hacia la normalización en la región", concluyó Nebenzia.