Enis Sujak, un inmigrante serbio que reside en Jacksonville, Florida, trabajó para Geek Squad en una sucursal local de Best Buy hasta el 1 de septiembre, cuando presuntamente fue despedido por no estar de acuerdo con un video de capacitación obligatorio sobre la historia de la comunidad LGBT, según escribió en la descripción de su campaña en GiveSendGo.
Sujak afirmó que en lugar de satisfacer las necesidades de un cliente que estaba esperando, le indicaron que viera el vídeo.
«Como cristiano, creo que el matrimonio es entre un hombre y una mujer. Sin embargo, por alguna razón, Best Buy insistió en que me presentara a una serie de lecciones sobre ‘La historia del movimiento LGBTQ’ mientras tengo clientes esperando mi ayuda», escribió.
“Mi capacidad para ayudar y atender a los clientes con reparaciones electrónicas y la orientación sexual de mis colegas no tienen nada en común. De hecho, la sexualidad no tiene lugar en el lugar de trabajo, y obligarme a someterme a una conducta que creo constituye un pecado y al mismo tiempo alejarme de atender a los clientes de mi antiguo empleador es simplemente inaceptable; de hecho, es ilegal”, agregó.
El 2 de septiembre, se hizo pública por primera vez las acusaciones contra Best Buy y el gerente de Sujak, Mike Hirsch, mediante un audio filtrado revelado por el periodista activista James O’Keefe, quien previamente había sido miembro del Proyecto Veritas. Además, Sujak confrontó a Hirsch por las denuncias de discriminación cristiana en relación a las cosas que los empleados pueden exhibir en la propiedad de la empresa.
Hirsch, el gerente de Geek Squad, explicó al ex empleado la diferencia entre las banderas y símbolos del Orgullo LGBT y una cruz cristiana. Según él, ambos no son comparables, ya que ser cristiano es una elección personal, mientras que las orientaciones o identidades sexuales no son decisiones propias de las personas.
«Puedes elegir la religión al 1.000%. Tú estás eligiendo creer en el cristianismo o en los musulmanes o lo que sea; tú eliges eso. … No eligen a los homosexuales”, según dijo Hirsch.
Sunjak, quien ha contratado a un abogado, tiene la intención de demandar a Best Buy. Hasta ahora, ha recaudado más de $10,500 para pagar los costos legales de su demanda.
“De ninguna manera he argumentado que alguien que difiere en religión, género o sexo deba ser tratado de manera diferente; más bien, todo lo que quería era que me trataran igual que a ellos y que mis creencias fueran respetadas por igual”, expresó por escrito.
“Es hora de que luchemos, adoptemos una postura y defendamos nuestros derechos. No daré marcha atrás y cada contribución, por grande o pequeña que sea, nos ayuda en esta lucha”, finalizó.