Cerca del 40 % de los diabéticos desconocen que padecen la enfermedad, según un nuevo estudio realizado por la agencia analítica Aging Analytics Agency.
Así, en África (a excepción del norte del continente), el 60 % de los diabéticos no son diagnosticados; en el sudeste asiático, esa cifra alcanza el 57 %; le siguen la región del Pacífico occidental, con 56 %; Medio Oriente y el Norte de África, con 45 %; América Central y del Sur, con 42 %; y Europa, con 41 %. Mientras, Norteamérica registra los niveles más bajos de casos no diagnosticados, con 39 %.
Si bien esos niveles son bastante similares, la mayoría de las empresas especializadas en diagnóstico de diabetes se encuentran en EE.UU., donde hay 349 compañías, lo que representa más del 65 % del total (más de 530 empresas). Le sigue Reino Unido, con 21, la India, con 17, China y Australia, ambos con 11, que representan menos del 15 % del total. Otros países cuentan con menos de 10 empresas especializadas en diagnóstico de la enfermedad.
La desigualdad regional se evidencia también en el acceso a los tratamientos contra la diabetes, pues EE.UU. dispone de 1.466 centros médicos especializados en la enfermedad, lo que representa alrededor del 78 % del total mundial (más de 1.840). Le siguen la India, con 58; Canadá, con 51; Reino Unido, con 42; Japón, con 29; y Australia, con 24. Mientras, en los países de Latinoamérica el número de este tipo de centros médicos oscila entre 1 y 4, excepto Brasil, que cuenta con 5.
Esto se refleja en que tres de cada cuatro adultos con diabetes viven en los países de ingresos bajos y medianos. En todo el mundo, el número de diabéticos asciende a 537 millones de personas.
En un comentario a The Guardian, Caroline Mbindyo, directora ejecutiva de Amref Health Innovations, empresa encargada de proporcionar tecnologías sanitarias innovadoras a África, afirmó que la mitad de los africanos no tienen acceso a la atención sanitaria necesaria. Señaló que los habitantes de zonas remotas pueden vivir a horas o días de un centro médico. "La realidad es que el tiempo y el gasto para hacer este viaje significa que ni siquiera es una opción para muchos en estas comunidades. Les resulta imposible llegar a estos servicios", dijo Mbindyo.