El PIB alemán descendió un 0,2% entre julio y septiembre en comparación con el trimestre anterior, según 'Deutsche Wirtschafts Nachrichten'. El descenso de la economía se debe a la crisis energética, la elevada inflación y a un 'enfriamiento' de la economía mundial, afirmaron los expertos del Instituto Alemán de Investigación Económica.
El barómetro económico del Instituto Alemán de Investigación Económica (DIW, por sus siglas en alemán) que refleja el desarrollo económico general del país, descendió significativamente en octubre hasta los 74,3 puntos. El experto del Instituto Guido Baldi señaló que Alemania ya entró en recesión.
"Sin embargo, es probable que la economía se contraiga mucho menos antes de la escasez de gas que durante la crisis financiera o en el primer año de la pandemia de coronavirus", afirmó.
A pesar de ello, los riesgos de un futuro deterioro siguen siendo altos, apuntó la edición Deutsche Wirtschafts Nachrichten. El descenso de los indicadores económicos se debe principalmente a la crisis energética y a las elevadas tasas de inflación, así como a un enfriamiento general de la economía mundial. Como resultado, tanto el clima de consumo como el de inversión se deterioraron fuertemente. La crisis, además, contribuye a aumentar los costes de producción, indicó el medio.
Por su parte, otra experta del DIW Laura Pagenhardt subrayó que muchas empresas quieren esperar a que pase el invierno y se abstienen de realizar nuevas inversiones.
"Es probable que el número de pedidos procedentes de Alemania y del extranjero también disminuya en los próximos meses. Esto está contribuyendo a empeorar los sentimientos", comunicó.
Los economistas estiman que el producto interior bruto de Alemania ya se redujo en el trimestre de verano. Los expertos de 21 instituciones financieras encuestados por Deutsche Wirtschafts Nachrichten esperaban una caída del 0,2% del PIB entre julio y septiembre en comparación con el trimestre anterior. En la primavera de este año el PIB creció el 0,1%. En caso de dos trimestres consecutivos de cifras negativas, se habla de recesión, informó la edición.
Según los datos preliminares de la Oficina Federal de Estadística del país (Destatis), los precios al consumo en Alemania, armonizados con las normas de la UE, subieron un 11,6% interanual en octubre, y la tasa de inflación se aceleró desde el 10,9% de septiembre hasta una tasa anual del 10,4% en octubre y volvió a alcanzar un máximo histórico, el más alto desde diciembre de 1951. En términos mensuales, se redujo al 0,9% desde el 1,9%.