Lavrov criticó también el "curso irreflexivo" que busca "cancelar a Rusia", y recordó que, al seguirlo, "los anglosajones han conseguido la subordinación incondicional de todo el Occidente colectivo, la OTAN y la Unión Europea".
El canciller ruso dijo que el objetivo de Occidente es "fragmentar aún más el espacio postsoviético y malquistar a los pueblos". Un buen ejemplo de esta política, en su opinión, es "la creación de una 'antirrusia' en Ucrania".
Occidente "no está dispuesto a abandonar su enfoque de resolver las tareas de su propio desarrollo a cuenta de los intereses de otros", subrayó Lavrov. En particular, "no disimula sus intenciones de seguir invirtiendo en la lucha contra Rusia por las manos y a coste de la vida del pueblo ucraniano", denunció.
En el contexto más amplio, "la filosofía de 'divide y vencerás' se usa activamente por Occidente respecto a los países de la Comunidad de Estados Independientes con el fin de malquistar" a los pueblos de esta región eurasiática.
El jueves, durante una intervención ante los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, Lavrov declaró que la percepción del presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, en EE.UU. y países aliados sigue los pasos del conocido principio estadounidense de que "es un hijo de perra, pero es nuestro hijo de perra". Recordó también que el régimen de Kiev "le debe su impunidad, por supuesto, a supervisores occidentales, sobre todo, a Alemania, Francia y EE.UU.".
