Según el Ministerio de Defensa, los militares armenios violaron los puntos de la declaración de alto el fuego en Karabaj del 10 de noviembre de 2020 y "llevaron a cabo un acto subversivo contra unidades del Ejército azerbaiyano" en el territorio donde está desplegado temporalmente un contingente de mantenimiento de la paz de Rusa.
"Como resultado de la operación de respuesta realizada por las unidades del Ejército de Azerbaiyán, varias alturas en Nagorno Karabaj fueron tomadas bajo control", informaron a Sputnik desde el organismo.
Precisó que las acciones de Armenia provocaron la muerte de un militar azerí.
Azerbaiyán, durante su operación, destruyó "varias posiciones de combate de grupos armados armenios ilegales", equipos militares y municiones, así como lanzó un ataque aéreo contra una unidad militar.
A su vez, la Cancillería de Armenia acusó a Azerbaiyán de romper el cese del fuego.
"El 3 de agosto, las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán, violando una vez más la declaración tripartita del 9 de noviembre de 2020 de los líderes de Armenia, Rusia y Azerbaiyán sobre un alto el fuego en la zona del conflicto de Nagorno Karabaj, emprendieron una agresión en la zona de responsabilidad de las fuerzas de mantenimiento de la paz rusas, causando muertos y heridos", resalta el comunicado.
Ereván llamó a todas las partes a mantener sus compromisos e implementar las condiciones de dicho acuerdo, entre ellas el alto el fuego, la reapertura de la comunicación regional y el retorno de los prisioneros de guerra.
Nagorno Karabaj, de población mayoritariamente armenia, es foco de conflicto entre Ereván y Bakú desde que decidió separarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
Las hostilidades entre estos países volvieron a estallar el 27 de septiembre de 2020 con numerosas bajas en ambos bandos, pero un mes y medio después alcanzaron un alto el fuego con la mediación de Rusia.
Por acuerdo entre las partes, Moscú emplazó en la zona un contingente de paz tras la retirada simultánea de las fuerzas armenias de los distritos de Agdam, Kelbecer (Kalbajar) y Lachín, arrebatados a Azerbaiyán durante la guerra de 1992-1994.
En noviembre de 2021 las tensiones en la frontera se agudizaron de nuevo, con denuncias de ataques desde ambos lados.
En mayo pasado los presidentes de Armenia y Azerbaiyán acordaron comenzar los preparativos para unas negociaciones de paz y en el mismo mes los vice primeros ministros se reunieron en el marco del trabajo de la comisión para la delimitación y seguridad de las fronteras.
Pese a ese proceso de normalización de las relaciones bilaterales, los dos países se acusan mutuamente de ataques en la frontera.
