Los militares profesionales de la OTAN retirados de la plantilla son los que manejan los sistemas de lanzacohetes múltiples norteamericanos Himars entregados a Ucrania, comentó un portavoz de las fuerzas de seguridad rusas.
"Según unas fuentes en las Fuerzas Armadas ucranianas… las dotaciones de los sistemas Himars utilizados en el teatro de operaciones en el sur de Ucrania están formadas por militares de la OTAN retirados de la plantilla. A su vez, la custodia está a cargo de compañías militares privadas cercanas al Pentágono", informó el portavoz.
Relató que el apuntamiento de los sistemas Himars se efectúa mediante los satélites militares de EEUU. Después de una salva la lanzadera cambia rápidamente la posición de ataque.
"Cada salva de los Himars va acompañada de disparos de lanzacohetes primitivos como Uragan y Smerch. El objetivo es despistar a las fuerzas antiaéreas rusas con una gran cantidad de blancos y agotar su munición para cuando vuelvan a disparar los Himars", explicó el portavoz al destacar que los equipos se desplazan y disparan ya entrada la noche durante el toque de queda.
También comentó que los militares de la OTAN no confían en los ucranianos, sean militares o civiles.
"Las dotaciones ucranianas de los lanzacohetes múltiples (Smerch y Uragan) que participan en los ataques conjuntos, no saben nada de los sistemas Himars desplegados a su lado ni se enteran de que actúan como tapadera durante los disparos de los Himars. Solo conocen la hora del disparo de la salva y las coordenadas de los blancos", dijo el portavoz de las fuerzas de seguridad rusas.
El presidente del Estado Mayor Conjunto de los Estados Unidos, Mark Milley, declaró que EEUU y sus aliados prometieron entregar a Ucrania más de 20 lanzacohetes múltiples Himars. De ese número ya fueron entregados 12 sistemas.
Según informó el Ministerio de Defensa de Rusia, al menos tres lanzaderas Himars fueron destruidas en el territorio de la República Popular de Donetsk.