El Consejo Federal de Suiza decidió este viernes que el envío a Ucrania de material bélico producido en el país violaría su principio de neutralidad y, por lo tanto, no puede ser aprobado.
De esta manera, el Gobierno del país alpino respondió a las solicitudes de Alemania y Dinamarca. Berlín había pedido su permiso para entregar a Kiev unos 12.400 cartuchos de munición de 35 milímetros producidos por Suiza para los cañones antiaéreos autopropulsados Gepard y para los vehículos blindados de ruedas Piranha III, adquiridos originalmente por Dinamarca y almacenados en Alemania desde su retirada del servicio. Por su parte, Copenhague tenía la intención de mandar 22 vehículos blindados Piranha III de fabricación suiza.
"Bajo la Ley de Material de Guerra, las solicitudes para exportar material bélico no pueden ser aprobadas si el país receptor está involucrado en un conflicto armado internacional", señala el Consejo Federal suizo en un comunicado. "Dado que las exportaciones de este tipo de bienes de Suiza a Ucrania no pueden aprobarse debido al principio de igualdad de trato de la Ley de Neutralidad y a las disposiciones de la Ley de Material de Guerra, se deduce que no es posible aprobar la transferencia de material de guerra suizo por parte de Alemania y Dinamarca a Ucrania", agrega.
Al mismo tiempo, el Consejo Federal suizo declaró que sigue siendo posible la exportación de suministros de material de guerra a compañías de defensa europeas. El organismo decidió sobre dos solicitudes de empresas suizas para exportar suministros de material de guerra en forma de piezas individuales y paquetes de montaje a empresas de defensa de Alemania e Italia. Una de las solicitudes se refiere a componentes para armas antitanque de mano, y la otra a componentes de armas antiaéreas. Sin embargo, apuntó que "en ambas solicitudes existe el riesgo de que algunos de los componentes se incorporen a material de guerra en el extranjero que luego podría pasar a Ucrania".
"La Ley de Material de Guerra permite a las empresas suizas participar en las cadenas de valor internacionales de la industria de defensa. Por lo general, la práctica del Consejo Federal ha sido aprobar la exportación de piezas individuales y paquetes de ensamblaje si su participación en el valor del producto final se mantiene por debajo de un determinado umbral (menos del 50% en el caso de Italia o Alemania)", explicó, agregando que "ha decidido mantener esta práctica" y que "las exportaciones de este tipo son compatibles con la Ley de Neutralidad".
En otra nota de prensa, el Departamento Federal de Defensa, Protección de la Población y Deportes de Suiza (DDPS, por sus siglas en francés) detalló que Alemania todavía puede disponer libremente de 42 tanques Leopard 2, que fueron usados por el Ejército suizo y revendidos a su productor alemán, Rheinmetall, en 2010.
"Se desmantelaron el cañón de 120 mm, la instalación de lanzamiento múltiple, las ametralladoras, la instalación de comunicación de a bordo y otros equipos de todos los vehículos. Estos elementos permanecieron en Suiza con la intención de ser utilizados como piezas de repuesto para los tanques Leopard restantes", precisa el DDPS, y señala que "el uso posterior de los tanques vendidos hace ya doce años es responsabilidad exclusiva de Rheinmetall".
Desarrollado en los años 70, el Leopard 2 es un carro de batalla principal de tercera generación.