EE.UU. admite que los ingresos energéticos de Rusia aumentan pese a las sanciones

Un alto funcionario de EE.UU. ha admitido que Rusia está cosechando más ingresos de la venta de sus combustibles fósiles en comparación con las ganancias que obtenía antes de las sanciones en su contra tras el operativo militar en Ucrania. "No puedo negarlo", dijo Amos Hochstein, asesor principal para la seguridad energética del Departamento de Estado, al responder si Moscú recibe más beneficios del comercio de su gas y petróleo.
Hochstein enfatizó durante una audiencia ante la Subcomisión del Senado para Europa y Cooperación en Seguridad Regional que, aunque Rusia vende con descuentos sus hidrocarburos a China y la India, el repunte de los precios en el mercado global significa que ahora sus ingresos probablemente son mayores.
En este sentido, el alto cargo aseguró que instó a la India a no beneficiarse del petróleo ruso, mientras los consumidores en países occidentales tienen que pagar precios récord.
"He dicho: 'Miren, no tenemos sanciones secundarias que puedan prohibir sus compras a Rusia. Yo les pediría dos cosas: una, que no vayan demasiado lejos. Que no parezca que se están aprovechando del dolor que se está sintiendo en los hogares europeos y en EE.UU. Segundo, asegúrense de negociar bien, porque si no compran [el petróleo], nadie más lo hará", sostuvo el asesor.
Mientras, la agencia Bloomberg reportó esta semana que Nueva Delhi busca duplicar sus importaciones de crudo ruso a través de los suministros de la petrolera Rosneft. En mayo, las compras de petróleo ruso por parte de la India se duplicaron en comparación con abril hasta alcanzar unos 840.000 barriles diarios, según datos del analista de materias primas Kpler, citados por Reuters. La firma indica que en junio la cifra puede sobrepasar un millón de barriles por día.
En el caso de China, también se observó el incremento de las importaciones de petróleo ruso, aunque a tasas menores debido a los recientes confinamientos masivos por el covid-19, detalla el diario The Financial Times.
El 8 de marzo, el presidente estadounidense Joe Biden anunció la prohibición de importar petróleo, algunos productos derivados, gas natural licuado y carbón de Rusia como respuesta al operativo militar en Ucrania.
Por su parte, la Unión Europea, que inicialmente era reticente a imponer el embargo sobre el petróleo ruso y se centró en sancionar al sector financiero y bancario de Moscú, acordó introducir la prohibición en mayo. Para finales de este año, el bloque comunitario planea cortar los suministros rusos en el 90 %. Sin embargo, la medida no afecta a Hungría y varios otros países sin salida al mar, dado que no pueden satisfacer sus necesidades sin importar el crudo ruso. 
El mes pasado, la Agencia Internacional de Energía estimó que las ganancias de Moscú crecieron un 50 % desde el inicio del año hasta 20.000 millones de dólares por mes.
The Financial Times evalúa que en las últimas semanas el crudo ruso Urals se vendía a casi 30 dólares por barril menos que el crudo Brent, cuyo precio rondaba este jueves 123 dólares por unidad.