El canal Ucrania 24 informó el lunes que seis barcos rusos que transportaban misiles de crucero se posicionaron en el mar Negro y probablemente se estaban preparando para un lanzamiento masivo de misiles en el territorio de Ucrania.
La noticia sale a la luz mientras el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, insta a los países occidentales a enviar más equipos y suministros militares a su país para enfrentarse con el Ejército de Rusia.
“Necesitamos su apoyo, necesitamos armamento, armas que tendrán mejores capacidades que las armas rusas”, dijo el lunes Zelenski, según ha recogido el diario estadounidense The Los Angeles Times. “Es una cuestión de vida o muerte”, subrayó en un evento celebrado en Milán, Italia.
Esto mientras las autoridades rusas han pedido en reiteradas ocasiones a los países occidentales que no continúen brindando ayuda a Ucrania, amenazando con ampliar el alcance de la guerra si el país recibe misiles de largo alcance.
Moscú inició el pasado 24 de febrero una operación militar especial en Ucrania, con el objetivo de la “desmilitarización” y la “desnazificación” de Kiev, y ha reiterado repetidamente que su operación no implica ninguna amenaza para la población civil de Ucrania.
Además, Moscú asegura que la operación está avanzando “según lo planeado”. El lunes, Rusia informó que sus fuerzas destruyeron una estación de mando ucraniano de drones Bayraktar TB y dos de estos aparatos de producción turca en el aeródromo de Arcis, en la región de Odesa, el puerto más grande de Ucrania en el mar Negro.
El ataque fue efectuado con un misil de crucero supersónico Ónix, según el portavoz del Ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov.
