Rusia carga contra la propuesta de EE.UU. de celebrar un tribunal sobre Ucrania y dice que Washington debe participar en un juicio por sus crímenes en Yugoslavia e Irak.
El presidente de EE.UU., Joe Biden, ha pedido este lunes que se celebre un juicio contra su homólogo ruso, Vladímir Putin, a quien ha calificado de “criminal de guerra”, por la presunta masacre cometida por tropas rusas en la localidad ucraniana de Bucha.
En reacción, la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, ha condenado las declaraciones del mandatario estadounidense y ha aconsejado a Washington a empezar los procedimientos sobre los crímenes cometidos en la antigua Yugoslavia e Irak.
“Biden pide un juicio por crímenes de guerra. ¡Gran idea! Que empiecen con el bombardeo de Yugoslavia y la ocupación de Irak. Todavía pueden encontrar a los principales directores de las producciones de Srebrenica”, ha afirmado al respecto.
Al desarrollar su postura, la vocera ha aludido al tráfico de órganos en Kosovo bajo la cobertura de funcionarios estadounidenses y también el bombardeo nuclear de las ciudades de Hiroshima y Nagasaki de Japón durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
Imágenes de cuerpos tendidos en las calles de Bucha, algunos con las manos atadas, fueron difundidas el sábado y Kiev acusó a Moscú de esa matanza. No obstante, el Ministerio de Defensa de Rusia dejó claro el domingo que las fuerzas rusas abandonaron Bucha el pasado 30 de marzo, mientras que las imágenes se difundieron cuatro días después, cuando los miembros del Servicio de Seguridad de Ucrania y la televisión local llegaron a la localidad.
Además, afirma que los hechos —los cuerpos de las víctimas no presentan rigor mortis, no tienen las manchas características de los cadáveres, y en las heridas hay sangre no coagulada— “confirman de forma irrefutable” que las publicaciones de Bucha son otra escenificación de Ucrania para los medios de comunicación occidentales.