El valor del euro cae a su nivel más bajo de los últimos cinco años

El valor del euro se ha situado este miércoles en 1,0512 dólares por unidad, su nivel más bajo de los últimos cinco años frente a la divisa del país norteamericano, debido a la incertidumbre económica que se vive en la región, informa Reuters.
Por su parte, el dólar ha continuado su alza, camino a su mayor ganancia mensual desde enero de 2015, ya que aumentaron las expectativas de que la Reserva Federal de EE.UU. suba las tasas de interés de forma agresiva en los próximos meses y la economía estadounidense sea más fuerte que la zona del euro.
"La flagrante incapacidad del euro para recuperarse ante los comentarios agresivos de los miembros del Banco Central Europeo significa una vulnerabilidad persistente a un entorno externo afectado negativamente por una situación cada vez más preocupante en Ucrania y la fortaleza generalizada del dólar", explicaron en una nota a sus clientes los estrategas de ING FX.
En opinión de Jeremy Stretch, jefe de estrategia de divisas del Banco Imperial de Comercio Canadiense (CIBC, por sus siglas en inglés), la moneda de EE.UU. se beneficia de la perspectiva de un "vuelo continuo" hacia una oferta de liquidez de seguridad.
De acuerdo con Bloomberg, la inflación de los precios de las importaciones en las principales economías europeas ya se encuentra en su nivel más alto desde la creación del euro, en 1999. "Un euro más débil aumenta directamente los precios de las importaciones y aumenta el riesgo de destrucción de la demanda, ya que las familias simplemente dejan de gastar", reza el artículo del medio estadounidense.
Según Reuters, una de las razones por las que el euro ha caído es que este miércoles Rusia ha suspendido los suministros de gas a Bulgaria y a Polonia tras su negativa a pagarlo en rublos, lo que ha llevado a los inversores a vender euros y comprar dólares estadounidenses.
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, tildó esa medida de "injustificada" e "inaceptable", asegurando que se trata de "otro intento de Rusia de utilizar el gas como herramienta de chantaje".
El pasado 23 de marzo, el presidente ruso Vladímir Putin anunció que su nación solo aceptará pagos en rublos por el suministro de gas a los países "no amistosos", entre los que figuran muchos de la Unión Europea (UE), como respuesta a las "medidas inamistosas sin precedentes en el sector económico y financiero" dirigidas contra Moscú.
Esto significa que ahora para efectuar el pago por el gas ruso, las empresas occidentales deben abrir dos cuentas especiales en el banco Gazprombank: una en rublos y otra en divisas. Los pagos deben realizarse mediante transferencia de euros o dólares a la cuenta correspondiente. A continuación, el banco vendería esta moneda en la Bolsa de Moscú y abonaría la suma recibida en la cuenta en rublos del comprador extranjero, transfiriéndose el dinero a Gazprom. Según el decreto del mandatario ruso, es la recepción de rublos por parte del productor de gas lo que debe considerarse como pago por el suministro de combustible.