Según un estudio de investigadores de la Universidad estadounidense de Stanford y una empresa de consultoría minera con sede en el estado estadounidense de Arizona, Corea del Norte puede obtener todo el uranio que necesita a través de su Planta de Concentrado de Uranio Pyongsan.
La agencia británica de noticias Reuters ha precisado este jueves que, según el informe, este aumento de uranio puede tener lugar sin necesitar otros molinos de uranio, y ha indicado que las imágenes satelitales de pilas de relaves sugieren que Pyongyang puede producir mucho más combustible nuclear de lo que ya fabrica.
“Está claro que la República Popular Democrática de Corea (RPDC) parece tener una capacidad de molienda sustancialmente mayor de la que ha estado utilizando hasta la fecha. Esto significa que este país podría producir cantidades mucho mayores de uranio natural molido si lo desea”, reza el informe, empleando el nombre formal de Corea del Norte.
En este sentido, el reporte señala que, conforme a analistas, la Planta de Concentrado de Uranio Pyongsan y su mina asociada son la única fuente de mineral de uranio reconocida públicamente de Corea del Norte.
El informe se produce en momentos que otras imágenes satelitales tomadas desde el 25 de agosto hasta el 9 de septiembre de este año mostraron obras de expansión en el complejo nuclear norcoreanode Yongbyon (noroeste) y que según los analistas podría usarse para producir uranio apto para armas.
“Dado el programa nuclear activo norcoreano, es de suma importancia evaluar y comprender su capacidad de producción de materiales nucleares”, alertaron los autores del informe.
Cabe recordar que Corea del Norte suspendió las pruebas nucleares y de misiles durante un proceso diplomático con Estados Unidos en 2018, hasta 2020, cuando el líder norcoreano, Kim Jong-un, anunció que el país estaba “desarrollando un sistema de armas de última generación que solo poseen países avanzados”.
Pyongyang sigue fortaleciendo su poder militar, asegurando que sus actividades tienen carácter de autodefensa ante las maniobras de su “mayor enemigo”, Estados Unidos y su aliado cercano, Seúl.