La compañía, entre cuyos inversores se encuentran los magnates Bill Gates y Murray Edwards, forma parte de la industria de captura, utilización y almacenamiento de carbono y su actividad se centra en eliminar las emisiones de los sectores más difíciles de descarbonizar, en particular el transporte, así como en limpiar las emisiones del pasado. Además, con el dióxido de carbono capturado, la compañía planea generar combustibles más respetuosos con el medioambiente para aviones, barcos y automóviles.
Si bien instalaciones de este sector han estado operando desde la década de 1970, la inversión en esta tecnología ha aumentado considerablemente en los últimos tres años, luego de que el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU (IPCC, por sus siglas en inglés) resolviera que los intentos actuales de reducir las emisiones no serían suficientes para limitar el calentamiento global a 1,5 grados Celsius y que la remoción de carbono tendría que ser el objetivo fundamental de la humanidad.
De acuerdo al centro de expertos Global CCS Institute, en diciembre de 2020 había 26 instalaciones de captura y almacenamiento de carbono a gran escala en funcionamiento en todo el mundo y 37 en diversas etapas de construcción. Estas instalaciones ya están capturando 40 millones de toneladas de dióxido de carbono al año.
No obstante, para cumplir con los objetivos establecidos por el IPCC, la producción tendrá que aumentar al menos 100 veces para 2050. Carbon Engineering tiene ambiciosos planes para instalar plantas en todo el mundo, cada una de las cuales podrá capturar un millón de toneladas de carbono al año, lo que equivale aproximadamente a 40 millones de árboles o a eliminar 200.000 vehículos de las carreteras durante un año.
Los expertos pronostican que la industria de captura y almacenamiento de carbono crecerá aproximadamente el 13 % anualmente y alcanzará los 9.990 millones de dólares para 2027.
