Ese fue el milagro atribuido a la intercesión de la religiosa colombiana María Berenice, que el miércoles fue reconocido por el Vaticano el al anunciar su beatificación.
“Sebastián empezó a rezar, a pedirle a la madre. Una noche sintió que lo alzaban, se levantó de la cama y se fue a buscar al papá. Cuando él lo vio le advirtió que se podía fracturar, pero Sebastián decía que estaba bien, se arrodillaron y le dieron gracias a Dios”, contó a The Associated Press la hermana Alix Mercedes Duarte, postuladora de la canonización.
El caso de Sebastián, quien todavía vive, fue estudiado por un tribunal en la Santa Sede que analizó testimonios de más de 20 personas, su historia clínica y conceptos médicos.
“Van a ser 19 años que estoy caminando sin sentir mis piernas, sin ayuda de nada ni de nadie, solo con la intercesión de la hermana María Berenice, por la fe. Los médicos todavía no se explican cómo ocurrió, pero todos estamos aquí con un propósito que nos da dios”, dijo a la AP Sebastián, de 34 años.
La monja María Berenice nació en 1898 en Salamina, al noroeste de Colombia, y falleció en 1993 en Medellín, donde hay un museo sobre su vida y fue enterrado su cuerpo. Ella fundó la congregación de las Hermanitas de la Anunciación, las Hermanas Franciscanas Misioneras de Jesús y de María, y los Misioneros de la Anunciación.
“Fue una mujer que realmente se dedicó a los pobres, siempre estuvo en su vida pendiente de las familias y la educación de los niños... apasionada por la Eucaristía y por Nuestra Señora de la Anunciación, tenía un espíritu mariano grande”, dijo a la AP Enith María Vergara Correa, consejera general de la Comunidad de las Hermanitas de la Anunciación.
La Conferencia Episcopal de Colombia indicó el miércoles en un comunicado que la Arquidiócesis de Medellín será la encargada de definir la fecha en la que se realizará la ceremonia de beatificación.
En 2019 el papa Francisco declaró a María Berenice Venerable Sierva de Dios porque consideró que vivió “las virtudes de manera heroica”.
