Un grupo de colonos judíos incendiaron hoy una granja de animales palestina en la aldea de Aqabra, al sur de la ciudad cisjordana de Nablus, informaron fuentes palestinas.
Los atacantes entraron en la granja de ovejas sobre las 3:00 hora local (0:00 GMT) y escribieron con spray "venganza sangrienta", explicó Gasan Daglash, responsable del centro palestino que vigila la actividad de los colonos.
"Los vecinos lograron ayudar a Fadi Basim Bani Jabir, el dueño de la granja, a sacar las ovejas, pero la estructura quedó destruida. Los colonos procedían de la colonia ilegal de Itamar", cercana a Nablus, explicó Daglash a los medios.
La acción de colonos ultranacionalistas se produce en medio de la ola de ataques contra árabes en Israel que ha estallado después de que el lunes el Ejército hallara los cadáveres de tres estudiantes israelíes que desaparecieron el pasado 12 de junio en Cisjordania.
Anoche, un joven palestino desapareció igualmente en una calle de Jerusalén este cuando salía de la mezquita y su cuerpo sin vida, con signos de violencia, fue encontrado hoy por la Policía israelí en una zona boscosa de la ciudad santa.
Los agentes admiten que investigan si se trata de una venganza de colonos ultranacionalistas, después de que testigos asegurasen que el chico, de 16 años, fue obligado a meterse en un coche por desconocidos.
Además, cuatro adolescentes israelíes fueron detenidos anoche tras atacar a dos palestinos que trabajaban en el centro de Jerusalén, donde decenas de personas se manifestaron al grito de "muerte a los árabes" para pedir venganza por el asesinato de los tres estudiantes judíos en Cisjordania.
La Policía israelí elevó el lunes la alerta de sus fuerzas al nivel 3, de un total de 5, tras el hallazgo de los cadáveres de los tres jóvenes judíos secuestrados el pasado 12 de junio cuando hacían autostop en Cisjordania, por el temor a un deterioro de la situación y a posibles represalias por nacionalistas judíos.
Las miradas apuntan al grupo "Tag Mehir" (El precio a pagar), con un largo historial de ataques contra blancos palestinos, como el más propicio para una acción de venganza.
Los colonos ultranacionalistas judíos ya lanzaron una campaña de ataques racistas contra intereses palestinos -incluidas y iglesias y mezquitas- en las semanas previas a la histórica visita del papa Francisco a Tierra Santa, que culminaron con unos pocos arrestos.