El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU), la Unión Europea (UE) y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) abordarán reuniones de emergencia sobre la situación en Ucrania.
Tras la luz verde de la Cámara alta del Parlamento ruso, el Consejo de la Federación, al presidente de Rusia, Vladimir Putin, sobre el uso del Ejército en el territorio de Ucrania, el Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá de urgencia este sábado.
Este encuentro, en el que participarán los 15 embajadores de los países miembros, ha sido convocado a petición del Reino Unido y tendrá lugar a las 14.00 hora local (19.00 GMT).
Asimismo, de acuerdo con el Servicio de Acción Exterior de la Unión Europea (EEAS), los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) mantendrán este lunes una reunión extraordinaria en relación con el caso, convocada por la alta representante de la Unión Europea, Catherine Ashton, para las 12:00 GMT.
Igualmente, el Consejo de la OTAN planea realizar una reunión para el próximo lunes, según ha informado el ministro de Asuntos Exteriores en funciones del Gobierno ucraniano, Andriy Deschitsia. "El lunes tendrá lugar una reunión especial del Consejo del Atlántico Norte sobre Ucrania", precisa.
Por otra parte, el canciller del Reino Unido, William Hague, ha asegurado que la decisión del presidente ruso condujo a Londres a "convocar al embajador de Rusia para expresarle nuestra profunda preocupación".
Después de la petición de la República Autónoma de Crimea al Gobierno de Moscú para que restaure “la paz y la calma” en esa región, la Duma rusa (Cámara baja del Parlamento ruso) ha demandado también este sábado al presidente del país, Vladimir Putin, que proteja al pueblo de Crimea de “la tiranía y de la violencia".
Putin, en respuesta, ha presentado una solicitud al Senado para enviar tropas a Ucrania, que le ha sido concedida por unanimidad.
Desde que el Parlamento ucraniano (la Rada) destituyera al presidente del país Víctor Yanukóvich, las tensiones en este país han aumentado y ahora Crimea, región prorrusa, se niega a secundar al Gobierno proccidental de la capitalina Kiev.
