
De acuerdo con los datos hechos públicos por la Policía, la brigada antiterrorista ya está investigando el caso. Las cabezas de cerdos fueron recibidas en tres cajas separadas, todas enviadas por un servicio de correo que desconocía el contenido de las mismas.
Los envíos se realizaron tres días antes de que se celebre el homenaje anual internacional a las víctimas del Holocausto.