
Los líderes de los extremistas emitieron una circular especial en la que ordenaron detener la venta de portadores y reproductores de música, así como dejar de usarlos y reproducir música. En el documento se explica que la música "distrae a la gente al adorar a Dios y leer el Corán".
Otro decreto prohíbe categóricamente a los residentes de Siria vender cigarrillos y accesorios para pipas. También está prohibido fumar en todas partes.