El 28 de febrero, la Policía de la ciudad de Ostroda recibió un aviso de que podría haber personas necesitadas de ayuda en un piso. Al acudir a la dirección, los agentes encontraron los cadáveres de un matrimonio, una mujer de 49 años y un hombre de 57, con numerosas heridas de arma blanca y cortante, según el informe policial. Posteriormente se informó que estaban rociados con líquido inflamable, lo que indica que habían intentado quemarlos.
Ese mismo día, su hija Klaudia W., de 27 años, fue detenida como sospechosa cuando intentaba huir a una ciudad vecina. Según la revista Super Express, que recibió información de conocidos de la chica, esta había mostrado recientemente interés por el satanismo y la magia negra, así como por las drogas, que podría haber utilizado para envenenar a sus padres. A su vez, Daily Mail informó que poco antes de los hechos la chica había estado publicando fotos y vídeos siniestros en las redes sociales llamándose a sí misma "Lilith, la muñeca satánica".
Por su parte, el fiscal de Ostród, Rafal Kozinski, admitió en una entrevista a Super Express que la comunicación con la sospechosa es difícil, ya que hace declaraciones "ilógicas", como inicialmente declararse culpable y después afirmar su inocencia. De momento se la acusa de doble asesinato y de profanación de cadáveres, pues intentó quemar los cuerpos. Actualmente está en prisión preventiva a la espera de juicio.