El Gobierno surcoreano va a adoptar en el plazo de un año una ley según la cual dejará de venderse y servirse carne canina en la restauración pública, informa 'Reuters', citando a la dirección del gobernante Partido del Poder Popular. Siguiendo esta antigua costumbre, cientos de miles de perros son comidos cada año en este país asiático.
Seúl pretende prohibir el consumo de carne de perro y poner fin a la polémica sobre la controvertida tradición de comer carne canina en medio de una creciente conciencia sobre los derechos de los animales.
"Es hora de acabar con los conflictos sociales y controversias en torno al consumo de carne de perro mediante la promulgación de una ley especial para ponerle fin", dijo Yu Eui-dong, jefe de políticas del oficialista Partido del Poder Popular.
En este contexto, el Ministerio de Agricultura del país prestará el "máximo apoyo" a los productores de carne de perro para que puedan cerrar sus negocios.
De acuerdo con los datos de la ONG Humane Society International, en Corea del Sur se consume alrededor de un millón de perros al año en las comidas. En el país hay unas 1.150 granjas de perros, 34 mataderos, 219 empresas de distribución y cerca de 1.600 restaurantes que sirven alimentos elaborados de la carne canina, según datos gubernamentales.
“Un sueño convertido en realidad para todos los que hemos hecho una campaña tan dura para poner fin a esta crueldad”, comentó el organismo en su comunicado.