Los gobiernos de varios países de América Latina han expresado sus reacciones sobre el conflicto palestino-israelí con matices que van desde la advertencia de romper relaciones con el Estado de Israel, por parte de Colombia; la condena al ataque de Hamás que escaló las hostilidades; y el ofrecimiento de ayuda humanitaria, por parte de Venezuela.
Los mandatarios y cancillerías de Argentina, Chile, Colombia, El Salvador, Honduras, México y Venezuela han expresado sus opiniones sobre el recrudecimiento de la violencia y las muertes de civiles productos de los enfrentamientos.
La mayoría ha abogado por el cese al fuego, por una salida dialogada a la conflagración en la que medie Naciones Unidas, por la protección del pueblo palestino en la Franja de Gaza y por la apertura de un corredor humanitario en esa zona.
Hamás lanzó el pasado sábado 7 de octubre un ataque a gran escala contra Israel. En respuesta, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró el estado de guerra —por primera vez desde 1973— y comenzó "operaciones militares importantes".
La posición más enérgica en contra del Estado de Israel ha sido expresada por el mandatario colombiano, Gustavo Petro, que incluso puso sobre la mesa la posibilidad de romper relaciones luego de que el Ministerio de Relaciones Exteriores israelí dijera que sus afirmaciones eran antisemitas y de respaldo a Hamás.
"Si hay que suspender relaciones exteriores con Israel las suspendemos. No apoyamos genocidios. Al presidente de Colombia no se le insulta", escribió en la plataforma X.
Tras el ataque de Hamás a territorio israelí, Petro ha publicado en las redes sociales varias interacciones donde ha expresado su enérgica condena a la respuesta de Israel, que ha bombardeado la Franja de Gaza, causando centenas de muertes, entre ellas las de niños palestinos.
El líder del Pacto Histórico se ha referido a la necesidad de que se establezca un "tratado de paz basado en la idea de dos Estados libres: Israel y Palestina". Además, ha calificado de "imperativo" que se llegue a un alto el fuego y que se fortalezca la Autoridad Palestina (AP) sobre la Franja de Gaza.
En respuesta, el embajador de Israel en Colombia, Gali Dagan, señaló que primero hay que "eliminar al gobierno terrorista de Hamás" para que la Autoridad Palestina regrese a Gaza.
Pero no quedó allí y el tono se incrementó considerablemente cuando desde el Ministerio de Relaciones Exteriores hebreo convocaron a la embajadora de Colombia en Israel, Margarita Manjarrez, "para una conversación de reprimenda" debido a que consideran "hostiles y antisemitas" las distintas declaraciones de Petro, contra el Estado de Israel.
"Israel condena las declaraciones del presidente que reflejan un apoyo a las atrocidades cometidas por los terroristas del Hamás", dice el escrito publicado en las redes.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, informó en la plataforma X que había sostenido una conversación telefónica con el presidente de la AP, Mahmud Abbas, "sobre la terrible situación en la Franja de Gaza" y "los ataques indiscriminados a la población civil, por parte de Israel".
Maduro expresó que ambos coincidieron en "exigir un inmediato cese al fuego y el establecimiento de un canal humanitario de asistencia a la población", además del "restablecimiento de la legalidad internacional", a través del cumplimiento de las resoluciones de la Organización de las Naciones Unidas.
En esa conversación, el mandatario venezolano reafirmó el "apoyo incondicional de Venezuela a la causa palestina" y le notificó que su país enviaría más de 30 toneladas de ayuda humanitaria, en los próximos días, a la Franja de Gaza.
En su programa 'Con Maduro +', el líder bolivariano recordó que el mundo ha sido testigo de "masacres brutales y el despojo del pueblo palestino, que ha sido sometido a un nuevo 'apartheid'".
El presidente venezolano llamó sus pares a "exigir el cumplimento de las resoluciones de la ONU, el cese al fuego, el respeto a los derechos de los pueblos y el establecimiento del diálogo".
Maduro también agregó que en manos de Europa y EE.UU. está que este conflicto no termine en una guerra regional, de carácter mundial, "porque son ellos los que están azuzando, creando condiciones, echando gasolina al fuego en las campañas que hacen en los medios para que haya un genocidio".
Por su parte, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, indicó que la postura de su país es "a favor de la paz" y recordó que la política exterior mexicana se basa en la no intervención, la autodeterminación de los pueblos, la cooperación para el desarrollo y la solución pacífica de las controversias
El mandatario mexicano propuso convocar de manera urgente una asamblea extraordinaria de Naciones Unidas para abordar el tema y aseveró que la nación que encabeza no quería "tomar partido", en virtud de ser un "factor para la búsqueda de una solución pacífica".
Esta neutralidad no fue bien tomada por la embajadora de Israel en México, Einat Kranz Neiger, quien rechazó su posición.
"La embajadora expresó que no está conforme con nuestra postura y tiene todo su derecho a decirlo porque somos libres", le respondió el mandatario .
El jefe de Estado mexicano manifestó que respeta al Gobierno de Israel pero rechaza la guerra y la violencia.
"No queremos que pierda la vida ningún ser humano de ninguna nacionalidad, sean de Israel o sean palestinos", dijo.
El mandatario chileno, Gabriel Boric, escribió en su cuenta de la plataforma X que condena "sin matiz alguno los brutales atentados, asesinatos y secuestros de Hamás. Nada puede justificarlos ni relativizar su más enérgico rechazo".
Al mismo tiempo, expresó su repudio contra "los ataques indiscriminados contra civiles que lleva adelante el Ejército de Israel en Gaza y la ocupación ilegal por décadas de territorio palestino, violando el derecho internacional".
Nuestra solidaridad está y estará siempre con la víctimas de la violencia, sin distinción. Nos duele la humanidad. Condenamos sin matiz alguno los brutales atentados, asesinatos y secuestros de Hamas. Nada puede justificarlos ni relativizar su más enérgico rechazo. Condenamos…
Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores chileno publicó un comunicado donde pide a las partes respetar el derecho internacional humanitario y los derechos humanos.
"Chile hace un llamado al inmediato cese de los bombardeos indiscriminados contra la Franja de Gaza y la urgente apertura de un corredor humanitario", dice el texto.
En el documento también se afirma que el país suramericano piensa que debe "buscarse una solución duradera al conflicto" y poner fin "a la ocupación ilegal por parte de Israel de territorio palestino".
El presidente argentino, Alberto Fernández, ha expresado en sus redes su repulsa al "atroz ataque que Hamás perpetuó contra el pueblo israelí" y ratificó el compromiso de su país "con la paz y la solución pacífica de los conflictos".
Me comuniqué telefónicamente con el presidente de Israel, @Isaac_Herzog, y le transmití la solidaridad del pueblo y del Gobierno de Argentina. Repudiamos enérgicamente el atroz ataque que Hamás perpetuó contra el pueblo israelí en el sur de su país.
Expreso mi enérgica condena y repudio al brutal ataque terrorista perpetrado por Hamás desde la Franja de Gaza contra el Estado de Israel.Reciba el pueblo de Israel toda la solidaridad de este presidente y del pueblo argentino.
Al respecto, la cancillería de Argentina manifestó su preocupación "por el creciente deterioro de la situación y la escalada de violencia en Medio Oriente" y destacó la necesidad de la protección de los civiles.
El Gobierno de ese país suramericano también pidió que se permita el acceso de la ayuda humanitaria internacional "para aliviar el sufrimiento de la población civil palestina en la Franja de Gaza".
El presidente del El Salvador, Nayib Bukele, escribió días atrás que como salvadoreño con ascendencia palestina está "seguro de que lo mejor que le podría pasar al pueblo palestino es que Hamás desaparezca por completo".
"Esas bestias salvajes no representan a los palestinos. Cualquiera que apoye la causa palestina cometería un gran error al ponerse del lado de esos criminales", fustigó.
Por Honduras, se pronunció la Secretaría de Relaciones Exteriores, que también condenó los ataques de Hamás e hizo un llamado al "cese al fuego, a la paz, al diálogo y la conciliación".
"Exhortamos a las naciones del mundo a mediar por el respeto a los derechos humanos y a garantizar la coexistencia pacífica, segura y digna entre ambos pueblos", dice un comunicado.
El Gobierno de Honduras además rechazó "todo acto que ponga en riesgo la seguridad de la población civil, sea israelí o palestina".
"Los ataques indiscriminados y las provocaciones no hacen más que alimentar la espiral de violencia, concluye el texto.