Podemos hacer una lectura simbólica de lo que hace Tobías con el demonio Asmodeo, entendiéndolo como una alegoría de la acción de Jesús respecto al Diablo. No en vano "tob" en hebreo significa bueno. La lucha entre Tobías y el pez, sería alegoría de la lucha entre el Bueno por excelencia -Jesús- y el Leviatán. El Leviatán es símbolo del Diablo pero bajo atributos de monstruo marino. Cristo vence y le arranca el corazón y el hígado, y los quema. Esto produciría el exorcismo del mundo, la conjuración del mal en el mundo humano. Es decir, el poder de Satán queda quebrantado tras la victoria de Cristo en la Cruz. He visto a Satanás caer como un rayo, dirá Jesús. Por supuesto el mundo no estaba poseído por Satán, es una imagen, aunque sí que yacía en las tinieblas.
El matrimonio entre Tobías y Sara liberada del poder del demonio sería metáfora del matrimonio místico entre Cristo y la Iglesia. La recuperación de la vista del padre de Tobías sería símbolo de visión espiritual recuperada. Visión perdida con el pecado. El signo mesiánico de la visión de los ciegos, se produce ya en el libro de Tobías con la hiel del hígado del pez derrotado. La hiel es símbolo del sufrimiento redentor. El sufrimiento de Cristo nos ha devuelto la vista. Pero para obtener esa hiel que nos produce la salvación fue precisa esa lucha con el Leviatán. La hiel símbolo del sufrimiento de Cristo, aplicada por su misma mano, devuelve la vista a la humanidad. La vista que perdimos por la ceguera que nos produjo el Príncipe de este mundo.
Es interesante observar que la hiel amarga la produce el pez, símbolo del Diablo. El la produce y esa amargura la alberga en su seno. Pero esa misma hiel -símbolo del sufrimiento- en manos de Tobías -símbolo de Cristo- se transforma en medicina. Cristo transforma el sufrimiento en medicina de redención.
También es curioso que en toda la Biblia sólo se menciona una sola vez el hecho de salar un pez, y eso es en Tobías 6, 5. ¿Qué símbolo hay en salar ese pez que personifica al Leviatán? Yo creo que eso es símbolo de la condenación eterna. El pescado salado ya no se corrompe. Está muerto, completamente muerto, pero no se corrompe. Ese pez salado sería representación de la muerte eterna del Leviatán.