Los científicos de la Oficina de Meteorología de Islandia habían anticipado el fenómeno después de una serie de sismos registrados en la última semana que revelaron actividad volcánica cerca de la corteza terrestre.
El Fagradalsfjall está en un valle deshabitado, a unos 32 kilómetros de la capital. Pese a que se encuentra cerca del Aeropuerto Internacional de Reikiavik, ninguno de los vuelos ha sido cancelado y todas las instalaciones siguen abiertas. Sin embargo, las autoridades advierten a la población para que no se acerquen al volcán.
En el video en vivo que transmite cómo se desarrolla la erupción se puede apreciar cómo el magma sale de una fisura estrecha de entre 100 y 200 metros de largo sobre un campo de lava, la huella que dejó la erupción del año pasado.
"No sabemos en qué fase está el proceso", dijo al medio el vulcanólogo Magnus Tumi Gudmundsson cuando se disponía a subir a un helicóptero para visitar el lugar. Asimismo, reconoció que, en un primer momento, la erupción parecía ser de menor escala.
