Este viernes el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, justificó el envío de armas a Ucrania en el marco de la operación rusa en ese país, basándose en un derecho consagrado por la Iglesia.
"Existe el derecho a la defensa armada en caso de agresión", afirmó el cardenal, citado por Reuters. Parolin, quien es la figura más importante de la Iglesia católica después del papa, explicó que este derecho está consagrado en el Catecismo de la Iglesia Católica Romana, pero aclaró que solo se cumple bajo determinadas condiciones.
Describiendo de qué se tratan dichas condiciones, Parolin detalló: "Sobre todo [la condición] de la proporcionalidad, y entonces que la respuesta no produzca mayores daños que los causados por la agresión".
"Esto es en el contexto de una 'guerra justa'. "Yo diría que la cuestión del envío de armas [a Ucrania] puede situarse en este marco", añadió.
Las declaraciones de Parolin parecen contrastar con la posición que mantiene la máxima autoridad eclesiástica, el papa Francisco. Hasta ahora, el pontífice se ha abstenido de calificar el conflicto como una guerra justa, cuestionando si algún conflicto puede considerarse completamente justo.
Los pronunciamientos del secretario de Estado de la Santa Sede se produjeron en el marco de la reciente reunión del G7 en Alemania, donde las naciones del grupo debatían el tema de la ayuda militar a Kiev.
El cardenal también señaló que el Vaticano todavía estaba dispuesto a hacer todo lo posible para buscar un acuerdo negociable entre las partes.