Jeremías 45:5
Este es el secreto firme e inmutable del Señor para los que confían en Él: Te daré tu vida…¿Qué más puede desear el hombre que su vida? Es lo esencial. Tu vida por botín significa que adondequiera que vayas, incluso al infierno, saldrás de allí con tu vida y nada la podrá dañar. Muchos de nosotros hemos adquirido el hábito de lucir las cosas para que los demás nos vean; no nuestras posesiones materiales, sino las bendiciones. Todas ellas tendrán que pasar, pero hay algo más grande que nunca pasará: "La vida que está escondida con Cristo en Dios", Col_3:3.
¿Estás preparado para dejar que Dios entre a una unión plena con Él y a no prestarle más atención a lo que tú llamas las cosas grandes? ¿Estás dispuesto a rendirte por completo y a soltarlo todo? La verdadera prueba de nuestra entrega es que nos negamos a decir: “Bueno, ¿y qué va a pasar con esto?” Cuídate de las suposiciones. En el momento que le das cabida a un: “¿Qué pasa con esto?”, demuestras que no te haz rendido, que no confías realmente en Dios. Pero, tan pronto como te rindes, ya no piensas más en lo que el Señor va a hacer. La entrega implica que no te permites el lujo de hacer preguntas. Si te rindes por completo a Dios, Él te dirá enseguida: Te daré tu vida por botín. Muchas personas están cansadas de la vida porque Dios no les ha dado nada, no han recibido su vida por botín. Para salir de ese estado debes rendirte a Él. Y cuando lo hagas, serás la persona más sorprendida y satisfecha del mundo. Dios te podrá tener completamente, sin limitaciones y te dará tu vida. Si esta no es tu condición, es por desobediencia o porque te niegas a ser lo suficientemente sencillo.